Enmarcada por las montañas, el lago Lácar y la pintoresca ciudad de San Martín de los Andes, La Pastera museo del Che, es una alternativa distinta para conocer la vida y el pensamiento de este mítico personaje. El edificio del museo es una pieza de colección en sí misma que data de 1946. Integramente construido en madera.
Desde la entrada se aprecia la voluntad estética de conservar ese espíritu de mediados del siglo pasado, con un expendedor de nafta similar al que estaba ubicado en La Pastera cuando Ernesto Guevara y Alberto Granado eligieron este lugar para pasar la noche.
PANELES
En la sala principal, los paneles dinámicos e informativos recrean la vida del líder revolucionario, con una biografía ágil, acompañada por fotografías inéditas. Los paneles temáticos que completan la muestra nos acercan la visión del Che sobre los trabajadores, la juventud, su concepción del hombre nuevo, Fidel Castro, la familia… Cálidos y precisos a la vez, los textos van sumergiendo al visitante en su apasionante historia de vida.
El recorrido, que también cuenta con un homenaje a los desaparecidos durante la dictadura militar, termina en el entrepiso de la sala donde se puede observar una ambientación con fardos de pasto, recreando el espacio donde durmieron Guevara y Granado en el verano de 1952.
Otra forma de navegar por la vida del Che es a través del multimedia, producido por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE). Entre escritos, videos, música y fotografías, se destaca el audiovisual institucional que muestra, además de la historia del Museo, imágenes de la inauguración el 20 de junio de 2008, a la que asistió Aleida Guevara March, una de las hijas del Che.
Otro soporte informativo es una pantalla de plasma donde se reproducen en forma permanente audiovisuales sobre la vida del Che, sus discursos y entrevistas.
El sector de librería ofrece joyas de colección: materiales, publicaciones, fotos y libros editados por el Centro de Estudios Che Guevara, La Habana Cuba.
La Pastera dispone de un sistema de calefacción y de servicios que garantizan las condiciones para disfrutar de una visita placentera y para las actividades al aire libre que se programan en la primavera y verano, cuenta con un anfiteatro.
“La Pastera, museo del Che” no es un museo más. Es un refugio para la historia, el análisis y la reflexión sobre uno de los personajes más emblemáticos de la historia.